Hoy escuché hablar de un reloj malo, de esos que no andan. Si bien, en su mal estado no funcionan, no es que sea un mal reloj.
Solo se, que en las infinitas funciones de un reloj malo, una de ellas, es marcar la hora dos veces al día.
II.
II.
Si, quizás esta mal, aún no lo asumo. Llevo una semana asistiendo a mi último año de colegio. ¿Qué le voy a hacer?, son las 3:15 AM, aún no me da sueño y es la razón por la cual escribo esta horripilante entrada.
Bueno, la cosa va mas o menos así: vivo mi crisis vocacional con la presión de que el tiempo pasa rápido. Ojalá el tiempo pasara tan rápido como dicen, llegar a tu primer día en primero básico, y luego estar en tu graduación de cuarto medio, abrazando a tus compañeros de curso, imaginando una estúpida vida, llena de deudas y vinos caros en el living de tu casa mientras tu esposa les cocina algo a ti y a tu único amigo con la eterna depresión que tiene por no cambiar del misionero ninguna noche. Pero así son las cosas y uno no puede hacer nada contra el sistema ni la vida.... solo sé, y que ojalá sirva de algo para algún cristiano que este leyendo esto con la misma crisis vocacional que yo, que a veces hay que creerse un poco el quién eres y que te gusta hacer, para que así, de a poquito, la gente te vaya creyendo también.
III.
Y así voy terminando esto, con crisis vocacional, insomnio, ganas de amar, de tomar y fumar... con el maldito deseo de que la vida fuera así, como un reloj malo, que solo marcara 2 veces la hora en tu vida, cuando naces y cuando mueres. Así la vida pasaría tan rápido que pagarías el precio de ser feliz, por no tener ninguna gota de sufrimiento y presión, pero bueno... supongo que cada cosa pasa por algo.
Cuando leí esto, sentí que estaba leyendo a otra persona.
ResponderEliminarTrata de no preocuparte de lo horripilante de la entrada, sino de su esencia, para que así sea enteramente tuya.
Saludos...
Gracias por el consejo, saludos.
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